A lo largo de la historia, muchas
son las leyendas que rodean a algunas especies de árboles, llegando a ser
considerados sagrados. Uno de ellos es el tejo (Taxus baccata), una especie que encierra muchos misterios y sobre la cual circulan
aún más leyendas. Parte de este misticismo está basado en su extraordinaria
longevidad, que lo hacía parecer inmortal ante los ojos de las diferentes
culturas. De hecho, pertenece a un grupo
primitivo de árboles del que se conocen fósiles desde el Triásico.
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| Arquero con arco largo |
Es un árbol muy estimado por su madera, con la
cual fabricaban arcos, flechas y herramientas.
La herramienta más antigua encontrada hasta la actualidad y fabricada de
madera de tejo, es un hacha de 50.000 años encontrada en Clacton (Inglaterra). Se han llegado a encontrar sarcófagos en
Egipto con más de 3.000 años fabricados con tejo. También se cree que la clave
de la victoria de los ingleses sobre los franceses durante la guerra de los
cien años (S.XIV-XV) fueron los llamados “arcos largos” fabricados con ramas de
tejo, que eran capaces de lanzar flechas con tanta potencia que atravesaban las
armaduras de los caballeros.
Pero estos no eran sus únicos
usos, de hecho, durante la guerra de las Galias, los celtas emponzoñaban las
flechas que usaban contra las tropas del emperador Augusto, con un brebaje
realizado principalmente a base de semillas de tejo. Esta es una de sus principales
peculiaridades, ya que dentro de la familia de las coníferas, el tejo es el único árbol conífero venenoso.
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| Ilustración Robin Hood |
Otra de las leyendas que rodean a
esta especie, es la vinculada a los bosques de Sherwood y a Robin Hood. Las historias
y baladas que han perdurado a lo largo de los siglos sobre este personaje,
hablan de un arco de una madera muy fuerte, que parecía irrompible incluso en
las circunstancias más adversas, y con una fuerza de tiro sin igual. De ahí que
muchos expertos barajen la posibilidad de que dicho personaje usase un arco de
madera de tejo.
Muchas son las leyendas y aún más
los misterios que rodean a estos árboles, pero nosotros nos quedamos con la
belleza de su madera.
